Durante años he escuchado a gente que genuinamente ama a Dios comentando -a veces amargamente- cómo le ha pedido mucho a Dios por alguna situación, pero nada pasa.
Empezaré esta reflexión aclarando que, por supuesto, creo en un Dios soberano que hace las cosas a Su tiempo, y que ese tiempo es perfecto; que actúa a Su manera pues ve y entendiende los panoramas mejor que nosotros. ¡Claro que, además, creo en el valor que tiene la espera en una respuesta de Dios a nuestras oraciones! He comprobado personalmente que esa espera construye en nosotros virtudes que difícilmente se generan en el gozo de la contestación inmediata. Sin embargo, también creo -y lo respaldaré bíblicamente- que hay circunstancias, territorios, cosas y autoridades que Dios ya nos dio y, por lo tanto, ya no se piden, se «arrebatan»
Permíteme ilustrarte la idea con un ejemplo más coloquial.
En tu trabajo, has acordado cierta cantidad de dinero como paga por cierta cantidad de horas. Este acuerdo es algo que está por escrito y firmado por ambas partes. Si llega el fin de mes y no recibes tu paga, intuyes que algo anda mal y entonces buscarás un acercamiento amistoso. Si al pasar dos meses, aún no recibes tu paga ¿qué haces? lo más seguro es que accedas a una instancia legal para cobrar lo que te corresponde por derecho.
Algo parecido ocurre en el Reino de los cielos. Cristo pagó un precio muy alto con su muerte para que tú y yo tuviéramos acceso a cosas que, por alguna razón, nos son robadas constantemente. Así que no podemos acceder a ellas amistosamente en esta tierra.
Vamos a la palabra:
Mateo 11:12 TLA
«Desde que Juan el Bautista comenzó a predicar hasta ahora, el reino de Dios avanza a pesar de sus enemigos. Sólo la gente valiente y decidida logra formar parte de él»
Es decir, solo «Los violentos lo arrebatan».
Entonces, teniendo en cuenta que hay cosas que por derecho nos corresponden, pero no las tenemos, y otras que necesitamos pedir constantemente, me gustaría hacer una pequeña lista de esas cosas que dice la Biblia que debemos pedir y otra de aquellas que es importante «arrebatar»
Juan 14:13-14
«Y todo lo que pidáis en mi nombre, lo haré, para que el Padre sea glorificado en el Hijo»
¿QUE COSAS DEBEMOS PEDIR?
- SABIDURÍA:
Santiago 1:5-8.
Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie.
- PERDÓN POR NUESTROS PECADOS:
Juan 1-9
«Si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos los pecados y para limpiarnos de toda maldad»
Pedir perdón a Dios no es solo un acto que refleja humildad, también refleja fe y reverencia. Como lo dice Juan, cada pecado trae consigo una maldad, así que pedir perdón por nuestros pecados no solo nos concede la libertad, sino también nos libra de la consecuencia espiritual, que aclaro, no necesariamente son las mismas consecuencias físicas.
- POR LO QUE NECESITAMOS
Una necesidad es aquello de lo que es imposible sustraerse o que no puede faltar. Pidamos por aquello que necesitamos.
Filipenses 4:6
No se preocupen por nada; en cambio, oren por todo. Díganle a Dios lo que necesitan y denle gracias por todo lo que él ha hecho.
- FORTALEZA PARA ENFRENTAR TUS PROBLEMAS.
Salmo 105
Recurran al señor y a su fuerza, busquen siempre su rostro.
- *PIDAMOS PORJERUSALÉN, POR LOS GOBERNANTES
Salmo 122 6-8
Pidan por la paz de Jerusalén; Sean prosperados los que te aman. Sea la paz dentro de tus muros, Y el descanso dentro de tus palacios. Por amor de mis hermanos y mis compañeros Diré yo: La paz sea contigo.
1 Timoteo 2:2
pidan por las leyes, y por todas las autoridades, para que tengamos paz y tranquilidad.
¿QUÉ DEBEMOS ARREBATAR, CONQUISTAR, PELEAR?
En el estricto sentido de la palabra, como te dije anteriormente, únicamente se arrebata aquello que nos fue quitado, se pelea en contra de lo que nos agrede y nos daña, y se conquista lo que por derecho es nuestro.
Aquí algunas cosas que tal vez necesitas arrebatar
- TUS TERRITORIOS ESPIRITUALES.
La Biblia habla constantemente de conquistas y, además, nos advierte que la vida es una batalla constante, como lo demuestra:
Josué 13:1
Era Josué ya viejo y entrado en años cuando el SEÑOR le dijo: Tú eres viejo y entrado en años, y todavía queda mucha tierra por conquistar.
- TU LIBERTAD ESPIRITUAL Y LA DE LOS TUYOS
Esta porción de la palabra nos revela la autoridad que tenemos dada por Dios para hacerlo y nos da detalles importantes que debemos tomar en cuenta a la hora de emprender nuestras conquistas.
«Te daré las llaves del reino de los cielos; todo lo que ates en la tierra quedará atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo.
Efesios 6:12
Revestíos con toda la armadura de Dios para que podáis estar firmes contra las insidias del diablo. Porque nuestra lucha no es contra sangre y carne, sino contra principados, contra potestades, contra los poderes de este mundo de tinieblas, contra las huestes espirituales de maldad en las regiones celestiales. Por tanto, tomad toda la armadura de Dios, para que podáis resistir en el día malo, y habiéndolo hecho todo, estar firmes.
Mateo 16:19
…Y el SEÑOR tu Dios echará estas naciones de delante de ti poco a poco; no podrás acabar con ellas rápidamente, no sea que las bestias del campo lleguen a ser demasiado numerosas para ti.
Deuteronomio 7:22
Amigos, es una realidad: no todo lo que nos aflige está plantado en el terreno de pedir. Hay mucho que podemos hacer teniendo la valentía de pelear.
Hagámoslo poco a poco.
Sin Prisa, pero sin pausa.
– Carolina Carvajal